El sábado 2 y ¨Domingo 3 del presente año (1995) estuvo en Treinta y Tres Pedro Ditera asistiendo a dos Grupos de Oración del P. Pío. Uno de ellos en la parroquia de la Virgen de los Treinta y Tres, cuyo párroco es el P. Jesuita Luis Rodríguez.
Momentos antes de tomar el coche para regresar a Montevideo, el domingo 3 a eso de las 20 horas, se solicita en la parroquia que Pedro llevara el mitón que tiene del P. Pío a un enfermo en estado muy delicado, que estaba en el hospital de esa ciudad; y así lo hizo.
Esa madrugada trasladan al enfermo a Montevideo, en una ambulancia, en estado muy delicado y lo llevan al hospital “Saint Bois”.
El joven es enfermero del hospital de Treinta y Tres, se llama Yury Almenar, tiene 32 años y el diagnóstico era derrame pleural en los dos pulmones.
Lo examinan varios médicos, uno de ellos el cirujano Profesor de 5º. Grado Dr. Guillermo Carriquiri.
Ante el asombro de lo que ve le dice: Usted está bien y puede volver a su ciudad natal Treinta y Tres y reintegrarse al trabajo. Está curado, no tiene nada en sus pulmones.
El mismo día lunes 4 de setiembre, regresa y comienzan a llamar a la casa de Pedro en Montevideo, vecinos, amigos y la madre del enfermo.
Todo era algarabía en su barrio, había regresado sano y su madre muy emocionada dice: “Mi hijo decía: ”si me salvo haré todas las promesas que ustedes hagan por
mí”. Yo, que era la madre de él, no creía ya en nada.
Damos gracias a Dios que medio de la intercesión del P. Pío, Yury se ha curado.
Doy fe: su madre
Estela Almenar Treinta y Tres
