En nombre de una religiosa del Instituto de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro le dirijo estas líneas, con el fin de poner en su conocimiento una gracia que recibiera su hermano, tras invocar la intercesión
del Padre Pío.
La religiosa se llama Antonia Rodríguez y su hermano se llama Vicente Rodríguez.
Estando desahuciado con un cáncer a la garganta, habiendo invocado al Padre Pío, le desapareció el tumor maligno.
Como había hecho la promesa de publicarlo, cumple por mi intermedio con la misma.
Con los mejores deseos de Paz y Bien para toda esa Comunidad, los saluda y los bendice
Roberto Cáceres Obispo de Melo