Reverendos Padres Capuchinos.
Causa de Beatificación de Padre Pío de Pietrelcina
Quiero darles cuenta de un importantísimo milagro que he recibido por medio del Padre Pío, estando mi
sobrino muy grave, en estado de coma a causa de un accidente automovilístico.
Encontrándome muy apenada recurrí a mi protector de siempre, el Padre Pío, y dado que el caso era muy
serio como podrán constatar en el certificado del médico tratante, recurrí al Padre capuchino de Punta del
Este, el P. Carmelo de Montevideo para que le aplicara el guante del Padre Pío.
En la tarde de ese mismo día yo no sabía que me ocurría, experimentaba una gran alegría en mi corazón
como si alguien me hubiera asegurado que mi sobrino se habría salvado.
Días más tarde, hacia las 8 de la noche, vino uno de mis hermanos a comunicarme la noticia de que mi
sobrino se había despertado y había recobrado el conocimiento abrazando a todos.
Fue algo tan hermoso que yo atiné sólo a dar gracias a Dios, gracias, mil veces gracias. Creo que nunca
podré expresar la inmensa alegría, el infinito agradecimiento a Dios por lo que nos ha concedido por
medio de su Santo, el Padre Pío.
Aquí en San Carlos, departamento de Maldonado, hay una grandísima devoción hacia este bendito
Padre. Todos los primeros domingos de cada mes se reúne el grupo de oración al que concurre
muchísima gente.
Es extraordinario: con solo nombrar al Padre Pío la gente cambia su modo de pensar, aún aquellos que
se declaran enemigos de los sacerdotes. Cuando llegar a conocer al venerado Padre, aceptan más
fácilmente a los sacerdotes y reciben los sacramentos.
Renovando mi agradecimiento, les saluda con gran respeto.
Olga N. de Nogués.
La Sra Olga N. de Nogués adjunta el siguiente certificado médico:
Certifico que yo fui el médico tratante en el momento en que el paciente sufrió gravísimo accidente de
tránsito.
Él ingresó en coma grado III, más inundación casi total de ambos pulmones por aspiración de vómito,
más paro cardio respiratorio. Apliqué medidas de reanimación.
En estos momentos, el paciente, (a los cinco meses) se encuentra trabajando.
Aún persiste cierta dificultad de la marcha.
Dr. Luis A. de León Díaz. San Carlos. Maldonado
