Soy Haydee Teresa Puglia Hernández, tengo 67 años, vivo en 25 de Agosto
Les cuento mi historia, fui fumadora de muy joven tenía 13 años a los 43 años me enfermé y después de muchos estudios el médico me dijo que si no dejaba de fumar no me daban mas de 5 años de vida por el susto dejé de fumar pero a los 3 meses volví a fumar asi pasé 4 años fumando y dejando.
Por unos vecinos madre e hijo muy mayores que yo siempre iba a conversar y me hablaban mucho del Padre Pio eran muy devotos fueron los que me dieron mi primer estampita del Padre Pio, fue así que siempre iba a su casa.
Conversábamos mucho, un día, el 24 de mayo voy y cuentan que el día anterior habían ido a misa y me contaron la cantidad de personas que daban testimonio de los milagros que el Padre Pío les había otorgado.
En el momento, mentalmente empecé a pedirle que me hiciera dejar de fumar, así pasé todo el día.
Cuando me acosté seguía con lo mismo en la mente, así me duermo, en el sueño en el cual aparece el vecino y me dice que así no, que tengo que subir acá y me muestra una tarima redonda de unos 10 cm de alto y dice que me pare en el centro.
Eso empieza a girar y yo siempre diciendo que si el Padre Pio me hiciera dejar de fumar, así termino el sueño.
A la mañana siguiente como todos los días lo primero que hago es encender un cigarro, lo fumo hasta la mitad y en el pecho lo rechazaba pero yo tenía ganas igual de seguir fumando.
A los 10 días me levanto y me da asco tan grande en la nariz que ni siquiera soportaba que alguna persona pasara cerca con un cigarro.
Todo esto pasó en 1997, estamos en 2018 y nunca más volví a fumar.
Este testimonio lo escribí en una carta, la mandé a Italia en el año 2000, en la revista del Padre Pio salió mi testimonio, sentí una emoción tan grande que no puedo decir con palabras.
Gracias Padre Pio!
