(…) (El Padre Pío) Se interesó mucho por nuestro querido Uruguay y en especial por Salto: me dijo que si en Uruguay hubiera tanto Clero como en Italia me haría quedar con él, pero como allá hay tan poco, si de él dependiera se iría conmigo, y que si fuese pulga se prendería de mi sotana para irse conmigo.