Oración del 26/7

Debes tener siempre prudencia y amor. La prudencia pone los
ojos, el amor pone las piernas. El amor que pone las piernas querría correr a Dios, pero su impulso para lanzarse hacia Él es ciego y podría tropezar en ocasiones, si no estuviera guiado prudencia que pone los ojos. La prudencia, cuando ve amor puede ser desenfrenado, le presta los ojos.

Padre Pío'

Tomadas del libro "Buenos días", preparado por el Padre Gerardo Flumeri y traducido del italiano por el Padre Elías Cabodevilla. Edición "Padre Pío Pietrelcina" Convento S. María delle Grazie.