Oración del 21/2

Persevera con paciencia en este santo ejercicio de la medita-ción y confórmate con comenzar dando pequeños pasos, hasta que tengas dos piernas para correr, y mejor alas para volar. Conténtate con obedecer que nunca es algo sin importancia para un alma que
eligió a Dios por su heredad, y resignate a ser por el momento una pequeña abeja de la colmena que muy pronto se convertirá en una
abeja grande, capaz de fabricar miel.
Humillate siempre con amor ante Dios y ante los hombres, porque Dios habla verdaderamente al que se presenta ante El con un corazón humilde.

Padre Pío'

Tomadas del libro "Buenos días", preparado por el Padre Gerardo Flumeri y traducido del italiano por el Padre Elías Cabodevilla. Edición "Padre Pío Pietrelcina" Convento S. María delle Grazie.